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domingo, 8 de julio de 2012

The Amazing Spiderman (2012)



No, no es mala película, pero de alguna manera, toda la maquinaria publicitaria y el hecho de que el listón esté tan alto tras Los Vengadores, me habían hecho forjarme otras expectativas: que éste iba a ser el Spiderman definitivo y que iba a barrer al de Raimi.

Pero no lo termina de barrer, entre otras cosas porque casi casi lo imita en bastantes ocasiones (hay secuencias, como la de los créditos de apertura, la última antes de los créditos finales o la del espejo que están casi calcadas), porque carga con el lastre del reinicio teniendo que contar otra vez el origen, por un componente ciertamente infantil y noventeramente kitch que se veía también en las de Raimi (poción verde chillón, poción azul chillón, ratón monstruoso, etc.) y que se aleja del tono de extitazos como Los Vengadores...

Tiene uno la sensación de estar viendo otra vez las de Raimi en gran parte del metraje. Los enfrentamientos con el Lagarto recuerdan a los de Venom en la tercera. Las voces que escucha el Lagarto recuerdan demasiado al Duende de Raimi. Los laboratorios y mejunjes de colores recuerdan a Raimi.

En la parte positiva, que no se queda corta: hay que decir que en el apartado estético éste es mucho más Spiderman que el de Raimi: no hay casi CGI (aquel fue un fallo tremendo de Raimi), y de alguna manera el actor con el traje (tan orgánico, tan palpable) da el pego totalmente: Es Spiderman. Hay un par de momentos épicos, además: el del niño que se pone la máscara y sale de las llamas (precioso) y el momentazo de "Spiderman héroe del pueblo": obreros y policías ayudando al arácnido. Tdoo ello está genial, pero visto lo visto... ¿Era totalmente necesario este reinicio? ¿O es que tal vez planean insertar pronto al personaje en el Universo Marvel y por eso querían prepararlo todo? Un servidor piensa que tal vez Raimi, aprendiendo de sus errores en Spiderman 3, habría sido capaz de hacer un Spiderman 4 épico, adaptado a los nuevos tiempos y a la altura de las últimas producciones. Tal vez, digo.

En la próxima parece que veremos a Osborn (si no al Duende) y quién sabe a qué faunístico enemigo (rinoceronte, buitre, camaleón, escorpión...). En definitiva, The Amazing Spiderman peca en algunos momentos del síndrome Superman Returns: parece estar imitando algo y aunque aporta cosas buenas no termina de adquirir su propia personalidad y destacar sobre el anterior producto. La última película del arácnido también adolece de cierta inconexión, de un montaje algo deslabazado, como pasaba con Green Lantern: The Movie; aunque la comparación no va más allá y la de 2012 me parece superior. Pero esta vez de seguro habrá una continuación, no como ocurrió con el Superman de Bryan Singer (quien pudo haber tenido una segunda oportunidad, por cierto). Esperemos que en ella se enmenden algunos errores o simplemente se consiga una cinta más redonda, con más cuerpo y más personalidad (los ingredientes los tiene). De lo contrario, estaremos ante una nueva y aburrida serie arácnida para engrosar las estanterías y la programación de los canales de pago.

Para terminar: el sentido del humor del personaje original sí se plasma en varias ocasiones (a partes iguales con el drama): al enfrentarse al Lagarto Peter tiene verborrea. Pero el mejor momento en ese sentido es ese "estornudo" con el que suelta un chufletazo de tela arácnida... directa a ciertas partes del maloso de turno.

En fin: tras Los Vengadores, todo corre el peligro de parecer poco... Y es que tener a 5 tipos a cada cual más fashion y poderoso peleándose entre ellos y contra un ejército extraterrestre sube demasiado la adrenalina como para sentarse a ver de nuevo el lento origen de un sólo personaje... a no ser que éste se haga maravillosamente y la experiencia sea cuasi-alquímica. Y no termina de serlo. En el género superheroico, como en el negro, el drama o el terror, no todo puede ser perfecto: hay historias sobresalientes (Los Vengadores; X-Men Primera Generación) y otras no tanto.

No todo puede ser perfección y excelencia, por mucho que nos estemos empezando a acostumbrar a películas rompedoras como las mencionadas de Marvel o el Batman de Nolan. Aún así, falta la perspectiva que da el tiempo para terminar de enmarcar esta producción, separarla de sus antecesoras y ser juzgada por sí misma. Porque el tiempo, ay el tiempo, produce reacciones extrañas e inesperadas en el ser humano: el otro día revisioné la tercera de Spiderman, esa tan vilipendiada por el bailecito funky del señor Maguire en medio de la calle... y mira tú, no me pareció tan mala después de ver The Amazing Spiderman. Al fin y al cabo, Sam Raimi es un director de peso y credenciales... ¿por qué lo sacarían del proyecto de Spiderman 4 cuando éste ya estaba iniciado, y ya se hablaba de un Ben Kingsley como el Buitre? Tal vez porque gente como yo empezábamos a cansarnos del enfoque personal de Raimi y pedíamos sangre nueva.

Lo dicho: Atentos estamos a una segunda parte.

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